¿si no tuvieras miedo que harías?

Sobreprotegemos al corazón y asi no solo evitamos males futuros, sino que también le estamos privando de vida, de gozo, de amor, de alegría... xq por miedo construimos muros demasiado grandes que ni siquiera nos dejan ver el cielo, xq llevamos mochilas llenas de miedos, a la soledad, a la inseguridad, a no ser lo suficientemente importante, al abandono... mochilas que pesan demasiado y no nos dejan saltar de alegría, correr, volar... xq el pasado es una losa que te presiona el pecho y te impide respirar al 100% de tus posibilidades, y el futuro..... q poderosa arma la del futuro que nos hace incapaz de vivir el presente, inventando historias o demasiado bellas, o demasiado dolorosas como para no saber ni donde pisamos, ni lo que sentimos... siempre viviendo hacia delante o hacia atrás.... nunca en el ahora... siempre con palabras q encierran emociones q no te aseguran nada.... ni un mañana, ni un pasado, ni mucho menos un futuro... la seguridad, la estabilidad, palabras irreales que buscamos xq somos incapaces de confiar en nosotros y en nuestra capacidad de reacción, buscamos metas erróneas, en sitios y en personas que no somos nosotros... buscamos llenar carencias que es imposible llenar si no nos damos cuentas que nadie esta ahí para llenarlas... que solo el corazón puede liberarnos de las cadenas... q solo él sabe lo que es mejor para él mismo... que la mente solo es un perro rabioso que tiene sed de infelicidad, y que se cree amo y señor de tu vida.... ¿si no tuvieras miedo que harías?

enjaulando emociones

Y yo pensaba que era la niña de las emociones.... y sin saberlo he jugado a encerrarlas en cajas en forma de palabras, bien definidas y clasificadas, pero no independientes.... como pájaros que cantan que un día fueron libres... que he exo? Me pregunto mientras escucho ese canto triste... y si las suelto?? que será de mi?? que hago yo sin mis palabras???

Espero curarme de ti...

Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad. 

¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante. En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor quemado. Y también el silencio. Porque las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada. 

Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: «qué calor hace», «dame agua», «¿sabes manejar?», «se hizo de noche»... Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho «ya es tarde», y tú sabías que decía «te quiero»). 

Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón.

Jaime Sabines

«Lo hicieron, porque no sabían que era imposible»

Y parece ser que soy la única que cree q esto puede ser...que aparte de tus brazos y tu cuerpo, tu vida y la mía pueden moverse hasta encajar... y me muevo con la certeza loca de quien siente que es posible... mientras que queramos que sea posible... quizá la ilusión soñadora que ha echo de mi vida algo especial, diferente, y hasta a veces increíble... la que pudo tocar los sueños antes de convertirse en realidad y sentir que todo se podía lograr mientras creyera en ello... que la vida te traería las personas y la forma adecuada para poder lograrlo... y como le digo a mi corazón, que tanto consiguió que se equivoca?? él no entiende de imposibles... entiende de dejar de luchar, entiende de miedos, de dudas, entiende de dolor, de despedidas... aunq también entiende de amor, de reecuentros, de felicidad... de sueños que se cumplen.... No puedo mentirle.... díselo tú a ver si te escucha...

De deseo somos

La vida, sin nombre, sin memoria, estaba sola. Tenía manos, pero no tenía a
quién tocar. Tenía boca, pero no tenía con quién hablar. La vida era una, y
siendo una era ninguna.
Entonces el deseo disparó su arco. Y la flecha del deseo partió la vida al
medio, y la vida fue dos.
Los dos se encontraron y se rieron. Les daba risa verse, y tocarse también.


Eduardo Galeano

hay amaneceres que saben a sal...

Hay amaneceres que saben a sal... son los que te despiertas preguntando si fue real o ficticio, los que hueles la almohada o buscas bajo las sabanas. Y un “pudo ser” retumba en tu piel, y un no quiso ser entre tus lágrimas..Y el vacío del futuro ya pintado se emborrona con mezcla de rabia y pena mientras q lo pintas de nuevo de blanco... pensaremos en un nuevo lienzo.. nuevos colores... nueva vida...